domingo, 22 de enero de 2012

lámpara de perfume


Esencia mediterránea.

Los cítricos forman parte de la cultura mediterránea desde tiempos inmemoriales. Una forma bonita, agradable y natural de conseguir un suave perfume a cítricos en la casa es hacer esta sencilla lámpara. Se corta a la mitad una naranja o un pomelo y una vez vacía la cáscara se hace una abertura superior en la mitad que quedará arriba, se pone en la de abajo un poco de aceite con mecha o una velita y se prende. Esta lámpara que se usaba en muchos pueblos proporciona un agradable olor al hogar.

lunes, 16 de enero de 2012

Bruselas, corazón medieval

El centro medieval de la ciudad de Bruselas gira en torno a la impresionante Grand Place o Grote Markt.


Entrar en ella al anochecer por la Rue des Harengs o la Rue de la Colline es emocionarse ante una de las plazas más bonitas de Europa. Patrimonio de la Humanidad y centro bullicioso sus edificios y adoquines han tenido una historia trágica en siglos pasados y ahora reciben a los visitantes entre flores, elegantes y caros cafés y exquisitas bombonerías. Si el tiempo acompaña merece la pena sentarse un rato en los adoquines del centro para ver pasar a la gente y mirar hacia arriba para descubrir una arquitectura exuberante y unos cambios de luz y color que hacen más mágico aún el momento.


Por la plaza se pasa muchas veces y se vuelve a ella a diferentes horas para verla a la luz del sol o bajo la lluvia y los paraguas. Los edificios más destacados son el Hôtel de Ville del s. XV, con su torre de San Miguel de 96 m. de altura, la neogótica Maison du Roi que fue mercado de pan y las Casas de los Gremios: maison des boulangers, la brouette, le sac, la louve, le cornet, le renard, l´etoile, le cygne, l´arbre d´or, la chaloupe d´or, le pigeon. Los gremios de la parte noroeste, son los que más me gustan.





Las calles aledañas bullen de vida, pero eso será en la siguiente parte de la visita...

sábado, 14 de enero de 2012

cencellada


Invierno. La niebla húmeda lo envuelve todo y la temperatura está varios grados por debajo del cero. Enfundados en la ropa de abrigo salimos a la calle cuando todavía es de noche. Tímidamente empieza a clarear por el este y la luz grisacea y azulada descubre el espectacular efecto de la cencellada durante la gélida noche.